Los paseos en camello en Marruecos son una de las actividades favoritas por muchos turistas en este país, especialmente para quienes viajan en familia, pues estos animales siempre llaman poderosamente la atención de los más pequeños. Así que en este post te mostramos algunos de los muchos lugares donde puedes disfrutar de esta experiencia. Por cierto, hemos empleado el término camello por ser la denominación más común para este animal, pero como te explicamos en este otro post, los que aquí están presentes son en realidad dromedarios.
Palmeraie de Marrakech
En la gran ciudad del sur de Marruecos, auténtica capital turística del país, hay lugares muy propicios para los paseos en camello. Uno de ellos es, sin duda, el palmeral o Palmeraie, una enorme agrupación de estos árboles que tiene más de un milenio de historia y un innovador sistema de captación de agua. En superficie, su amplio espacio brinda las condiciones idóneas para un paseo a lomos de estos nobles animales. Por tanto, suponen una magnífica combinación de fauna y flora típicas de Marruecos, a tiro de piedra de su ciudad más representativa.
Desierto de Agafay
A poco más de 30 km de Marrakech se encuentra este desierto, acondicionado con campamentos con todo lujo de detalles, que se ha convertido en una alternativa más accesible al desierto del Sahara, por su cercanía a la ciudad. Su terreno pedregoso de hammada con desniveles en forma de colinas es, en cualquier caso, propicio para pequeños paseos en torno a los mencionados campamentos. En muchos casos, los paseos son cortos, de apenas media hora, lo que supone una buena opción para niños que no están familiarizados con este animal y que de esta manera pueden entrar en contacto con ellos de forma sencilla.
De Merzouga a Erg Chebbi
No cabe duda de que el dromedario se impuso como ‘medio de transporte’ con las caravanas del desierto, que siglos atrás conectaban el norte de África con el área subsahariana. Así que para vivir la experiencia más parecida a lo que experimentaban los comerciantes del pasado, nada mejor que recorrer las dunas del Sahara marroquí. Concretamente, las de Erg Chebbi, en el desierto de Merzouga: para desplazarse desde esta localidad hasta los campamentos de jaimas bereberes, se hace necesario un paseo de dos horas a lomos de estos animales (la alternativa son los vehículos 4×4).
Por las playas de Essaouira
La ciudad costera de Essaouira, a unos 180 km de Marrakech, es una de las joyas turísticas del país. Y también uno de los lugares donde disfrutar de un paseo en camello en Marruecos. Lo que marca la diferencia aquí es que los tours te llevarán, a buen seguro, por las playas del litoral atlántico, a las afueras de la ciudad, donde el paisaje se mantiene aún muy virgen. Pasear por el arenal de las playas, con tramos en los que los dromedarios sumergen sus patas en el agua, mientras la brisa marina acaricia el rostro de sus jinetes, convierte a esta experiencia en una de las más recomendables.
Hasta el río Souss en Agadir
Cerramos esta selección de paseos en camello en Marruecos con la propuesta de Agadir, otro de los destinos turísticos por excelencia del sur del país. Aunque se trata de una ciudad bañada por el océano Atlántico, al igual que Essaouira, aquí muchas de las rutas en dromedario llevan ligeramente hacia el interior, concretamente por un bosque de eucaliptos a las afueras hasta llegar a las orillas del río Souss. Por tanto, el terreno es sencillo y propicio para un recorrido de este tipo, con fotografías igualmente hermosas del entorno.