Si te sumas a alguno de nuestros circuitos, ya sea privado o compartido, recorrerás diferentes ciudades y en ellas puede que te quede algo de tiempo libre para emplear a tu gusto. Una opción habitual es escaparse para visitar alguno de los museos de Marruecos. En el país hay una gran variedad, y en este post hemos seleccionado cuatro, repartidos por distintas ciudades, que te sorprenderán por su temática y por la riqueza de sus colecciones.
Museo de Arte Moderno Mohammed VI de Rabat
En Marruecos no encontrarás pinacotecas al modo occidental: el Islam impide la representación de Dios y del ser humano, de modo que el arte islámico ha tenido su propio desarrollo en el pasado, sin representaciones figurativas y, por tanto, con escasa o nula presencia de pinturas y esculturas. Sin embargo, el arte moderno deja abierto un resquicio: el gusto por lo abstracto o por la extrema imaginación ha hecho posible un cierto desarrollo de artistas contemporáneos. Y la mejor expresión de ello se puede contemplar en el Museo de Arte Moderno Mohammed VI de Rabat. Su edificio, de estilo neo hispanomusulmán, acoge obras de corrientes muy diversas: desde el impresionismo al arte tribal, pasando por otras muchas piezas de estilo inclasificable.
Museo Nejjarine de Fez
El Museo Nejjarine, también conocido como Museo de Arte y Artesanías de la Madera, se llama así por ubicarse en el espectacular e histórico Palacio Nejjarine: esta joya del siglo XVIII cuenta con un magnífico patio central cuya viguería, columnata y otros elementos estructurales están elaborados ricamente en madera de cedro. Fue una antigua fonda de acogida a mercaderes y comerciantes llegados a la ciudad. Por ello, la materia prima protagonista del museo es la madera: sus salas exponen objetos artesanales hechos en este material, entre los que destacan instrumentos musicales, muebles y herramientas de uso cotidiano, siglos atrás. Sin duda, un lugar en el que comprender el histórico prestigio de la artesanía de Fez.
Museo Yves Saint Laurent de Marrakech
El diseñador francés de origen argelino Yves Saint Laurent quedó fascinado con la ciudad de Marrakech, estableciendo una de sus residencias aquí, junto al Jardín Majorelle. La colección de este museo gira en torno a la obra del diseñador, con vestidos y outfits icónicos, así como exposiciones inspiradas en su estilo y legado. Además, al igual que los otros museos de Marruecos tratados en este post, el edificio del Museo Yves Saint Laurent de Marrakech destaca por su originalidad. En este caso, el estudio de arquitectos Studio KO apostó por materiales y colores netamente locales, en especial el ladrillo rojo, hecho con terracota del país.
Museo de la Legación Americana de Tánger
El cuarto museo de Marruecos que queremos destacar en este post y que puede quedar a tu alcance con nuestros circuitos es el de la Legación Americana (también conocido como Museo del Legado Americano). En este caso es un museo de historia, centrado en la importancia que tuvo para Estados Unidos y sus ciudadanos la ciudad de Tánger. Aquí vivieron muchos de ellos durante la primera mitad del siglo XX, cuando tenía el estatus de Zona Internacional. Sus salas están tematizadas con fotografías y documentos históricos, así como mobiliario y objetos que nos retrotraen a dicha época, como por ejemplo el espacio de trabajo del escritor Paul Bowles.
Además de estos cuatro museos de Marruecos, hay otros muchos en estas mismas ciudades o en otras distintas que, a buen seguro, merecen una visita, aunque sea fugaz. Algunos de ellos son el Museo de Marrakech o el Museo Orientalista en esa misma ciudad, el Museo Dar Jamai de Meknes, el Borj Nord de Fez o el Museo Judío de Casablanca.
